La vi ayer y flipe. Es una peli de terror setentera que copia, sin ninguna vergüenza, a “Tiburón”. Pero curiosamente, dentro del delirio, está muy bien rodada y tiene buenos sustos. Es la historia del ayudante del sheriff de un pequeño pueblo de Nuevo Méjico que trata de detener, desesperadamente, a un misterioso coche que está sembrando el terror en la región atropellando a peatones, ciclistas y autostopistas inocentes…
El final del filme es algo previsible, pero escenas como el ataque del coche a los niños durante el ensayo del desfile, la muerte del músico autostopista o el incesante acoso nocturno, levantan la cinta. Además, el reparto es de lo más serio, James Brolin, R. G. Amstrong, Kathleen Lloyd… Recomendable, para pasar un rato entretenido.
Ayer vi "El escritor", lo último de Polanski, y me decepcionó un poco, esperaba algo más. Pero después, me puse esta cinta y me vine arriba. Es uno de los muchos thrillers que rodó Charles Bronson en los años 70, junto a su mujer, Jill Ireland. Cuenta la historia de un tipo que llega amnésico a un hospital sin saber quien es, ni de donde viene. Un amable medico intentará ayudarle a recuperar la memoria, pero en el fondo, lo que pretende ese doctor es implicar a su paciente en un oscuro complot…
Una buena intriga con apenas cuatro actores y un par de decorados. Anthony Perkins está espléndido y Bronson demuestra, sin necesidad de pegar tiros constantemente, que era bastante buen actor. El suspense va in crecendo, la escena de la playa es inquietante y el final abierto le da un toque surreal a la cinta. Recomendable.
La vi ayer y me gustó. Taquillazo en Francia el año pasado, es una montaña rusa incesante, un momento de acción y después, otro de relajo, acción, relajo… así hasta el final. Divida en dos partes por su larga duración (tipo “Kill Bill”), cuenta la historia real de Jacques Mesrine, un tipo que en los años 70 se convirtió en el enemigo público Nº 1 de Francia. Atracador de bancos y ladrón, colaboró tanto con grupos como las OAS, como con grupos radicales de izquierdas, se evadió cuatro veces de la cárcel, asalto una prisión para liberar a sus compañeros, tuvo tres hijos con una mujer española y escribió un libro contando sus desventuras, hasta que, finalmente, la Segurité decidió quitarlo del medio para siempre…
Vincent Cassel está enorme, lleva todo el protagonismo de manera excelente. La ambientación de la época es impecable, tiene un largo reparto (Roy Dopuis, Mathieu Amalric, Ludivine Sagnier, Cecile de France, Olivier Gourmet, Gerard Depardieu) y Richet, director del interesante remake de “Asalto a la comisaria del distrito 13”, es capaz de apañárselas para no aburrir durante casi cuatro horas. Recomendable.
La vi ayer y es mejor de lo que aparenta en un principio. Es una especie de "Sospechosos habituales" a la argentina que narra como un grupo de ladrones viaja hasta Buenos Aires, tras dar un gran golpe en México, para blanquear el botín. Pero al llegar allí, alguien les roba todo el dinero y la desconfianza entre ellos desata el caos... Dentro del exceso de la historia, los actores están bastante creíbles, hasta Jordi Molla está bien, sale poco y se aguanta jaja... Hay escenas de acción curradas, algo de intriga y suspense. Es una de esas pelis donde nada es lo que parece y todo lo que se diga ya es demasiado. En definitiva, un thriller entretenido para pasar un rato.
La vi ayer y me gustó mucho. No es tan-tan buena como "Annie Hall", pero resulta entrañable ver de nuevo juntos a Woody Allen y Diane Keaton. La pareja hace esta vez de un aburrido matrimonio de mediana edad a los que la vida les da un giro radical cuando comienzan a sospechar de que su vecino, el Sr. House, supuestamente, ha envenenado a su esposa. Emparanoiados, comienzan a seguirle, a espiarle, se cuelan varias veces en su piso buscando pistas del crimen, metiéndose continuamente en líos y enredos divertidos...
Rodada deprisa, la cámara sigue a los protas por toda Nueva York. Hay chistes buenos (la escena del chantaje con las cintas de cassette), diálogos graciosos, un genial Alan Alda haciendo de amigo cafre y un estupendo homenaje al filme "La dama de Shangai" en la parte final. Comedia y suspense por partes iguales. Muy recomendable.
Ayer volví a verla y, no solo sigue siendo un peliculón, sino que además el paso del tiempo le está sentado muy bien. Es una cinta muy ochentera, macarra pero divertida, donde Brian de Palma vuelve a copiar por todo el morro a Hitchcock. Si en "Vestida para matar" hacia un remake encubierto y sinvergüenza de "Psicosis", aquí perpetra una versión muy cachonda de "La ventana indiscreta". Es la historia de un actor de segunda fila, que sobrevive en Hollywood haciendo penosas pelis de terror, medio eróticas. Un día, mientras espía a su guapa vecina desde la ventana, observa un asesinato. Empeñado en encontrar al culpable, acaba metiéndose en un montón de líos de la mano de una rubia actriz porno (una joven Melanie Griffith) que conoce por el camino...
Mucho suspense, tramposos giros sorpresa, humor y la inevitable escena de 360 grados del director. La escena del asesinato esta bien, pero las escenas de la playa son las mejores. Terror bajo el sol.
Mel Gibson perseguido, sin tregua, por un pelotón de motoristas asesinosen un futuro post-apocalíptico. Supongo que después de 30 años, la cinta de George Miller es todo un clásico. Tiene de todo, mucho suspense, buenas peleas, humor negro y una estupenda banda sonora. Mel Gibson está enorme, con un carisma a prueba de bombas, a pesar de lo joven que era por entonces. Cada vez que lo veo, el Max me recuerda al Clint Eastwood de "Por un puñado de dólares". Muy recomendable, incluso para menores de 10 años.
La vi ayer y está graciosa. Típica peli del Michael Moore, un documental cargado de humor, pero quizás, con un tono más pesimista de lo habitual en él. Moore analiza como en USA, durante los últimos años, todos los controles financieros sobre Wall Street fueron suprimidos poco a poco, a base de millonarios sobornos, para garantizar la impunidad total de los bancos. El resultado final fue un enorme agujero de 700.000 millones de dólares que tuvo que ser rellenado con dinero público y que al día de hoy, nadie sabe, ni siquiera el gobierno americano que aprobó el rescate, donde acabó ese dineral... Dos horas entretenidas, con gags y chistes afilados y alguna escena espeluznante, como la del desahucio inicial o cuando una senadora americana reconoce abiertamente que en Septiembre de 2008, dos meses antes del final del mandato de George W. Bush, hubo una especie de golpe de estado financiero encubierto. Curiosa.
La vi ayer y es una estafa, una de las mayores basuras que he visto. No hay historia alguna, solo una sucesión de escenas por donde desfilan un montón de cutres ídolos juveniles televisivos enseñando cacho. Aunque, al final solo se ven un par de pezones de refilón. Además, el final tiene algo de moralina barata, cosa lógica y achacable al pesimo guión firmado por la ex Ministra de Cultura, Angeles Gonzalez Sinde. Lo dicho, un puto TIMOOOOOOO.
La vi ayer y es una peli sencilla, pero muy apañada. A pesar de su bajísimo presupuesto, consigue levantar una historia muy entrañable. Es la historia de una chica que comienza a trabajar un verano en una fabrica de cadenas para la nieve, allí conoce a otros tres trabajadores con los que hará amistad amenizando su alienante turno de trabajo... Los cuatro actores, algunos amateurs, están bastante creíbles y la historia, que va de menos a más, resulta cercana y extrañamente familiar. Recomendable.
La vi ayer y me gustó. Es una peli muy efectista, con una estética muy marcada a anuncio de perfume, pero molona. Catherine Deneuve y David Bowie son una pareja de vampiros modernos a los que beber sangre ajena ya no les funciona como antes. Sus cuerpos inmortales están envejeciendo misteriosamente por lo que buscan con mucha ansia una cura a través de Susan Sarandon, una tímida doctora que investiga con primates nuevos tratamientos anti-edad en una clínica privada…
Es un buen drama con algo de terror suave y erotismo. Los efectos especiales y de maquillaje son de primera (la escena en que Bowie va envejececiendo rápidamente ante la cámara, muchos años por minuto, está muy lograda), la Deneuve sale muy guapa, aunque se le note la doble de cuerpo en las escenas de cama, y habla inglés con un curioso acento extranjero. Hay un par de buenos sustos, una aparición fugaz de un joven Willien Dafoe haciendo de macarrilla callejero y un inesperado giro final. Lo peor, sin duda, el peinado ochenteno de la Sarandon, jajaja...
La vi ayer y me gustó, se deja ver. Basada en una novela del escritor Paul Auster, la cinta cuenta la historia de dos tipos, Jim y Jack, que tras conocerse por casualidad durante un viaje por carretera, participan en una extraña partida de poker perdiendo todo su dinero y el coche. Para pagar las deudas contraídas, ambos deberán trabajar obligadamente, durante cincuenta días, construyendo un largo muro de piedra para unos excéntricos millonarios dentro de una finca boscosa. Aunque los dos protas trataran de huir de allí, no podrán hacerlo, pues estarán vigilados continuamente por hombres armados…
El filme es una mezcla de thriller de suspense y peli metafísica que comienza muy bien, luego tiene un pequeño bajón, pero al final remonta. Lo mejor de todo, la interpretación de James Spader, que está enorme haciendo de un pillo jugador de cartas, grasiento y fumador, que me recuerda mucho a personaje del perdedor de Dustin Hoffman en “Cowboy de medianoche”. El regordete Chris Penn tiene un breve papelito haciendo de matón simpático, y el propio Paul Auster hace un cameo en la escena final... Para pasar el rato, sin más.
La vi ayer y es un poco regulera, empieza muy bien, pero al final, no acaba de rematar del todo. Cuenta el caso real de dos famosos miembros de la Resistencia danesa apodados Flame, por ser pelirrojo, y Citron, por ser un ex-trabajador de la Citroen. Durante la ocupación nazi del país, ambos se dedicaron a liquidar a daneses colaboracionistas, hasta que un día, cegados por su éxito, decidieron ir más allá y subir el listón, atentando directamente contra altos cargos de las SS. Esto provocó que el estado mayor alemán tuviera que organizar una enorme cacería humana, poniendo patas arriba Dinamarca en su busca…
Tiene una buena ambientación de la época, actores creíbles (sobretodo, el tipo que hace de Flame) y escenas de acción secas y crudas, pero acaba faltándole un nosequé, algún giro más a la trama, se queda algo sosa. No tiene la profundidad, ni el suspense que tienen “El libro negro” o “Eric, Oficial de la Reina”, las cintas que sobre la Resistencia holandesa hizo Paul Verhoeven. Le falta ese toque tan particular, entre sórdido y real, del holandés. Pasable.
La vi ayer y me gustó mucho. Apenas dura una hora, es una pequeña película que guarda una gran moraleja. Cuenta la historia de un chavalín que, harto de trabajar como panadero, decide marcharse de su pueblo, abandonar a su novia e instalarse en Marsella. Allí, el prota cree que ganará mucho dinero viviendo al margen de la ley, pero, una vez dentro de una banda de ladrones, descubrirá que también así tiene un estricto horario que cumplir (como ratero cutre y chulo de putas) y un duro jefe al que obedecer. Además, si los planes se complican, no será despedido del trabajo, simplemente, alguien le cortará el cuello.
Rodada con sencillez, con actores casi amateurs, la cinta capta muy bien el turbio ambiente de los bajos fondos marselleses, con sus efímeras alegrías y terribles desgracias, con esos abarrotados gimnasios de barrio donde los chavales entrenan boxeo a todas horas, bien para fortalecerse, bien para matar el tiempo. La escena del asalto al chalet está muy lograda y la persecución final te pone la carne de gallina.
La vi ayer y me gustó. Es uno de esos thrillers policíacos, tan sencillos como eficaces, que rodaron Belmondo y Alain Delon en los años 80, cuando ambos empezaban ya a peinar canas y sus respectivas carreras decaían. Las tramas son siempre las mismas, el protagonista es un tipo duro (un periodista, un policía…) que, sin quererlo, se ve implicado en un feo asunto de corrupción político-policial y, tras ser perseguido toda la película, acaba por resolver el caso (con la inevitable ayuda de un antiguo amigo y una chica guapa). En este filme, Belmondo es Joss Beaumont, un agente del gobierno francés que, tras ser enviado a un país africano para “eliminar” a un presidente negro incomodo para la “democracia” francesa. Allí, será traicionado por sus superiores, pero Beaumont logrará sobrevivir a la cárcel, escapará y regresará a Paris para ajustar cuentas…
Muchos tiros, golpes y peleas (la escena del bar y el croissant está graciosa), algo del humor típico de Belmondo, una ligera crítica a las cloacas del estado, una gran persecución en coche con el mismísimo Belmondo al volante (haciendo todas las escenas de peligro y choques), música pegadiza de Ennio Morricone y un final memorable... Recomendable para fans de actor francés y amantes del genero "polar".
Ayer conseguí un cuco dvd donde vienen juntas "Los paraguas de Cherburgo" (1964) y "Las señoritas de Rochefort" (1966). Las dos pelis están rodadas por Jacques Demy y protagonizadas por la rubia Catherine Deneuve. La primera es un dramón ambientado a finales de los 50 en la gris ciudad de Chersburgo, en el norte de Francia. Allí, una pareja de jóvenes se conocen y se enamoran, pero, desgraciadamente, el chaval tiene que marcharse a hacer la mili, y encima es destinado a la dura guerra de Argelia. Cuando vuelve, las cosas han cambiado, pues cada uno ha rehecho su vida a su manera...
Apesar de la tristeza de la historia, la cinta es un musical casi abstracto. Aquí no hay números musicales tradicionales, sino que toda la película está cantada (los actores actúan normal, pero dicen todos sus diálogos cantado, como su fuera lo más normal del mundo). Es difícil explicarlo si no se les ve hacerlo. Además, está la fabulosa puesta en escena, con sus coloridos decorados, su vestuario calculado, sus calles pintadas... Todo ayuda a que el tono sea irreal y singular. La secuencia final, con los dos viejos amantes reencontrándose años después en una gasolinera y donde se ve a la hija de ambos tuvieron, es de las que no se olvida nunca. Recomendable.
La vi ayer y me gustó. Es una película española dirigida por la ex- Ministra de Cultura, Angeles González Sinde, y producida por el gran Anton Reixa. Cuenta la historia de dos amigas de la infancia, Milagritos y Rosario, que viajan desde Madrid hasta un pequeño pueblo de Guadalajara acompañadas de un amigo bigotudo llamado Morsa. Allí tienen la intención de enterrar al gato de Milagros que ha muerto, pero, lo que empieza como un absurdo trámite, termina revelando secretos terribles... La cinta empieza como una comedia simpática y termina siendo un dramón de cojones. Lo mejor de la cinta son el trío de actores, tanto la Malena Alterio, como Esperanza Pedreño y Antonio de la Torre resultan bastante naturales. También mola el trabajo de vestuario, los personajes visten con cierta estética setentera muy resultona. Hay chistes graciosos (como cuando barren las calles en pareja, o el conducir sin licencia el taxi) y hay cierto momento “El Pico” que sobrecoge por lo habitual que resultaba en los años 80 en este país. Algún día alguien explicará la verdad de toda aquella invasión de caballo, de como en momentos sociales concretos, el control sobre determinadas drogas ilegales disminuye sospechosamente.
Tras 25 años, sigue siendo todo un clasicazo de los 80. En realidad, es una desmadrada versión de una vieja peli francesa de los años 60, “El silencio de un hombre”, reconvertida aquí en una ensalada de tiros por el hongkones John Woo. Cuenta la historia de Jeff, un asesino a sueldo, que durante un tiroteo en un club hiere, sin querer, a una joven cantante dejando la medio ciega. Arrepentido intentará ayudar a la chica pagándole una costosa operación de corneas, pero esto hará que la policía se ponga tras su pista y que los mafiosos que le contrataron se nieguen a pagarle…
Chow Yun Fat está enorme dando saltos imposibles, disparando en el aire y tocando la armónica. Los tiroteos están muy bien coreografiados y sus efectos especiales y los especialistas que participan en ellos son de primera. También hay un breve momento para el amor y la risa, como los continuos enfrentamientos entre el prota y el comisario que le persigue que se van convirtiendo en una extraña amistad conforme avanza la cinta, dando lugar a situaciones muy estrambóticas...
La vi ayer y es estupenda. Es una sencilla comedia, rodada con gusto por John Huston. Fue la penúltima película que hizo este director, tan solo un par de años antes de morir con 81 años en 1987. Cuenta la historia de Charly (Jack Nicholson), un matón de mafia italiana que durante una boda conoce a Irene (Kathleen Turner), una guapa y misteriosa rubia que dice ser contable. Charly, enamorado de Irene, le pide enseguida matrimonio, pero resulta que ella, en realidad, es una peligrosa asesina a sueldo que debe mucho dinero a los Prizzi, la "familia" mafiosa de Charly. Esto meterá al prota en enredos y líos de todo tipo... Tanto Nicholson, como la Turner están espléndidos, tienen bastante química juntos. Y la Anjelica Huston, a la que le dieron un Oscar por hacer de la ex-mujer italiana de Charly, está muy graciosa urdiendo retorcidos complots a espaldas de todos. Hay buenos momentos de humor (negrísimo), como el tiroteo en el ascensor, algunos crímenes sin resolver y algo de suspense. Muy recomendable.
La vi ayer y es estupenda, una peli de espías sesentera muy bien rodada, con un inmenso William Holden y un trabajo de decorados y vestuario fantásticos. Cuenta la historia real de un industrial sueco llamado Ericsson, que fue captado por la inteligencia aliada durante la 2ª Guerra Mundial. Su misión era aprovecharse de sus contactos en Alemania para lograr información sobre refinerías y gaseoductos nazis, que luego serían saboteados. Ericsson acepta el encargo a regañadientes, pero tras conocer a otra espía, una guapa alemana que es su contacto, el tipo se anima. Por desgracia, ambos tendrán muy mala suerte, la Gestapo les descubrirá enseguida y debiendo huir... La peli empieza algo flojilla, pero luego la cosa se pone emocionante. Aunque dura más de dos horas, la cinta no se hace nada larga porque tiene un montón de escenas que están cuidadas al detalle (hay secuencias que duran unos segundos solamente, en estaciones, aeropuertos, fiestas o callejuelas, donde salen un montón de extras creando un ambiente realista). Las escenas de violencia son secas y rápidas, como el fusilamiento en la cárcel, o el cruel ahorcamiento del obrero polaco en huelga. Sin exageraciones, ni heroísmos, los protas son aquí gente normal, con sus miedos y defectos (incluso los alemanes), metidos en asuntos demasiado peligrosos para ellos. El actor Klaus Kinski tiene una breve, pero intensa aparición al final. Muy recomendable.
La vi ayer y me gustó. Escrita y dirigida por Sylvester Stallone, es la curiosa secuela de la mítica "Fiebre del sábado noche", aunque la única similitud con la primera parte es que el John Travolta hace nuevamente de Tony Manero. Aun así, la historia resulta coherente, pues Manero no es ya aquel chaval de barrio que trabajaba en una tienda de pinturas, sino un tipo que ha cambiado sus viejos pantalones campana y sus botines horteras por unos jeans nuevos y una chupa de cuero e intenta abrirse paso (al precio que sea) como bailarín en Broadway...
Se nota que en 1982 los EEUU no eran el mismo país que cinco años atrás, Ronald Reagan era presidente, la música disco había muerto y la cultura yuppie se imponía. La peli no tiene el drama, ni la seriedad de la anterior, pero tiene un estupendo ritmo, un buen trabajo de montaje y unos diálogos divertidos y entrañables (que si de verdad están escritos por el mismo Stallone, tienen su merito, pues son creíbles y sencillos).
La vi ayer y es cojonuda. Es un musical setentero que narra la delirante historia de Tommy, un niño inglés que tras sufrir un trauma de crío, se queda ciego, sordo y mudo. Pero, su repentina invalidez no le impedirá llegar a ser campeón del mundo de pinball, logrando fortuna y miles de seguidores que lo aclamaran como un nuevo Mesías…
Toda la cinta es un derroche visual. Ken Russel logra adaptar perfectamente la famosa opera rock de los Who. Es una especie de videoclip largo en una época donde apenas se hacían todavía videos musicales. La sucesión de escenas surreales es antológica, las canciones son buenísimas y hay un montón de cameos de actores y músicos famosos, como Tina Turner (enorme su secuencia), Elton John, Eric Clapton, Jack Nicholson, Keith Moon… Lo mejor de filme son las escenas donde canta la madre de Tommy, Ann Margret, que está fantástica, aunque la actriz no sea una cantante de verdad. También son para enmarcar los caretos de lelo que pone Roger Daltrey durante su auto enclaustramiento (creo que era la primera vez que el cantante actuaba y no lo hace nada mal como protagonista principal). Un filme muy curioso.
Hace poco murió Claude Chabrol, tenía 80 años y, aunque la noticia paso un poco desapercibida, era un tipo genial. Esta cinta la vi hace poco y es 100% chabroliana (mezcla de amour-fou y retrato sociológico de un pueblo francés, cercano a Burdeos, a finales de los años 60). Trata de un simpático carnicero que consigue enamorar a la maestra del pueblo a base de regalarle sabrosas paletillas de cordero y filetes. Pero, cuando comienzan a salir juntos, una serie de crímenes asola la región y esto hace que las sospechas se interpongan entre su relación... Dirigida con maestría y sencillez, Chabrol mezcla actores profesionales con gente del pueblo real donde se rodó la cinta. Hay espléndidos diálogos y una inquietante banda sonora que rompe la aparente tranquilidad de Las Landas. Los protagonistas trasmiten naturalidad a la oscura ambigüedad en la que se mueven todo el rato. Escenas de suspense como la de las cerezas, o cuando la maestra corre por la casa cerrando todas las puertas son emocionantes. Como la mayoría del director francés, recomendable.
La vi ayer y me gustó. Es un filme entrañable de Mike Leigh sobre una familia de clase trabajadora inglesa que sobrevive a la rutina diaria gracias a su inacabable sentido del humor. El padre trabaja en un restaurante como cocinero, la madre tiene una pequeña tienda de ropa, la hija mayor es aprendiz de fontanera y la hija pequeña se pasa todo el día en casa oyendo música o liándose con un amigo en bizarros juegos sexuales que incluyen pringoso chocolate Nocilla...
Un guión sencillo, bien rodado y con un puñado de actores muy creíbles. El gran Stephen Rea aparece haciendo de amigo timador que vende al padre una caravana ruinosa como si fuera la mejor de las gangas. Hay buenos diálogos, momentos tiernos y otros algo más divertidos, como los cutres intentos de ligue del dueño del restaurante con la cocinera, o el exaltado comportamiento de la pelirroja Nicola, la hija pequeña, y su nerviosa forma de hablar, repitiendo continuamente “Bollocksss” o “Fasciiiiist!!”. Curiosa y agradable.
La vi ayer y me gustó mucho. Es la típica película de Mike Leigh, una historia sencilla sobre gente corriente, bien narrada, sin complicarse la vida, mezclando momentos de humor y algo de drama. Narra el reencuentro de dos viejas amigas durante un agitado fin de semana. Ambas recorren Londres, recordando su época universitaria en los tacheristas años 80, cuando las dos mujeres eran dos fans histéricas de los Cure, compartían un piso destartalado con otros jóvenes estudiantes y ligaban con seguidores canallas de los Smiths.
La peli va saltando de una época a otra. En la época de mediados de los 90, la fotografía y la luz son cálidas. En la de mediados de los 80, en cambio, la luz es fría y azulada. Las dos actrices, Katrin Cartlidge y Lynda Steadman, están esplendidas y resultan muy creíbles haciendo tanto de veinteañeras porretas, como de treinteañeras amargadas. Algunos diálogos son muy divertidos, y escenas como el encuentro con el amigo gordo con el elefante azul de peluche, o la surrealista visita a la casa en venta del tipo cocainomano, son memorables. Para pasar un buen rato.
La echaron antesdeayer por la tele. A primera vista parece una peli de acción barata, pero en realidad es cojonuda. Está producida por Oliver Stone, protagonizada por un sensacional Dennis Quaid y, tanto el director, como casi todo el equipo, son yugoslavos (asi que saben de lo que hablan).
Cuenta la historia de un mercenario americano que trabaja para el ejército serbio durante la guerra de Bosnia (1992-1995). Tras un canje de prisioneros, conoce a una mujer serbia que, tras haber sido violada por un soldado bosnio musulmán, está embarazada. Al trasladar de nuevo a la mujer a su pueblo natal, el prota se da cuenta que tanto ella como el bebe son despreciados por sus parientes y que van ha ser asesinados, así que decide ayudarles a huir del país…
Es una historia muy triste y sórdida, como en verdad lo fue el conflicto en la ex-Yugoslavia hace 15 años. Tiene momentos muy duros y brutales como cuando la chica da a luz en el suelo tras ser pateada, o la escena del autobús y el martillo de madera. Pero, nada comparado con lo relatado por el periodista Joe Sacco en sus reportajes ilustrados "Gorazde, zona protegida", "El mediador" o "El final de la guerra". Tanto la peli, como los comics, muy recomendables.
Este finde he visto 2 pelis que son una muestra perfecta de como está el parorama del cine español. Una, "Gordos", tuvo bastante promoción y su director, reputación, pero en realidad, no deja de ser una aburrida sucesión de chistes groseros y simplones. Verónica Sanchez está espantosa y todo el asunto se hace interminable, dura casi 2 horas y le sobra 20 minutos como mínimo (lo mejor es ver al Raúl Arevalo haciendo de opusiano, un actorazo).
La otra peli, "After", que paso sin pena, ni gloria, sin mucha publicidad, pero es fantástica. Dura lo que tiene que durar y la televisiva Blanca Romero está fabulosa (y eso que es su primera película). Es la historia de tres amigos (Willy Toledo, Tristán Ulloa y Blanca Romero) que salen a cenar una noche y después se van de juerga. Conforme avanza la noche, el alcohol y las drogas van sacando lo peor de ellos... Es una cinta muy amarga, pero está contada de forma muy atractiva. Dividida en tres capítulos donde se presentan, por separado, a cada personaje.
Detalles como el niño que cree que su padre es un alienigena, la historia del perro secuestrado o la escena de la orgía son memorables. El director Alberto Rodríguez saca oro de su ajustado presupuesto, usa mil trucos y le funcionan. Está rodada en Sevilla, pero cuela como cualquier ciudad. A reivindicar...
La vi ayer y no está nada mal, me gustó. Es la primera peli de Santiago Zannou, y con ella ganó el año pasado el Goya al Mejor director novel. Cuenta la historia de dos tipos de un barrio del extrarradio de una gran ciudad que sueñan con montar un estudio de grabación en una bajera cutre. Para ello necesitan conseguir bastante dinero, por lo que recurren inocentemente al trapicheo. Pero la cosa no les sale bien del todo y empiezan a deber demasiado dinero a gente demasiado peligrosa...
El cantante del grupo de rap La Excepcion, el “Langui”, está fantástico haciendo del “Cuajo”, un minusvalido empeñado en salir del barrio a pesar de todo, sus líos con el macarra de su hermano resultan creibles. Quitando algun instante escabroso, la cinta mantiene bien el tono y dosifica estupendamente su ritmo. En el montaje se muestra siempre las acciones primero, por ejemplo, los protas se pelean (no se sabe muy bien porque) y cuando finaliza, en la siguiente escena, se aclaran los motivos de esa pelea. Todo esto hace que no pierdas el interes en ningún instante. La rapera Mala Rodriguez hace un curioso cameo al principio del filme. Está apañada.
La vi ayer y me gustó. Es una estupenda peli de ciencia ficción que da un giro de tuerca a las historias de naves espaciales perdidas en el espacio. Ben Foster (el James Woods del siglo XXI) es uno de los miles de pasajeros que viajan en una gigantesca nave hacia un planeta lejano, muy parecido a la Tierra, que los humanos pretenden colonizar. Como el viaje dura más de cien años, tanto el protagonista como los demas pasajeros van dormidos y criogenizados en pequeñas cápsulas, pero, a mitad de camino, tras una avería fortuita, algunos de los pasajeros se despiertan antes de tiempo de su sueño descubriendo, con gran horror, que la nave ha sido invadida por extraños bichos que se alimentan carne humana...
El reparto y el diseño de producción (los pasillos, las celdas de la nave...) son estupendos. Tiene buen ritmo, algo de suspense y sustos, un Dennis Quaid solvente y las peleas con los bichos resultan creíbles. Una cinta bastante curiosa.
La vi ayer y es tan recomendable (o más) que "Los paraguas de Cherburgo". Es la historia de un variado grupo de personas que se conocen durante un alegre fin de semana de feria en Rochefort, al oeste de Francia. Dos hermanas que quieren dejar el pueblo e irse a París, dos simpáticos feriantes, una camarera de mediana edad, un americano de visita por la localidad, un marinero que hace el servicio militar, un anciano con un oscuro secreto, un niño repelente llamado Boubou...
El tono general es jovial y luminoso, la ciudad de Rochefort aparece soleada, e incluso Jacques Demy se atreve a pintar las fachadas de las casas y las calles de colores. Aquí sí que hay números musicales tradicionales, los actores actúan y hablan con normalidad, hasta que en un momento dado, se ponen todos a cantar y bailar. Se homenajea al cine musical americano de los 50 (Gene Kelly hace un divertido cameo, marcándose un par de estupendos bailes, y uno de los feriantes es el prota de "West side story", George Charakis).
Pero a diferencia de Hollywood, aquí se rueda, casi todo, en escenarios naturales, en la calle, en la plaza, dentro del bar, en apartamentos de verdad... El sentimiento es más desenfadado y amateur, lo que convierte a la cinta en entrañable. Catherine Deneuve está guapísima (la escena del vestido rojo) y Francoise Dorleac, la actriz que hace de su hermana era también su hermana en la vida real. Desgraciadamente murió, a los pocos meses del estreno, en un tremendo accidente de tráfico.
La vi ayer y está divertida. Creo que fue la película más taquillera en Francia el año pasado. Cuenta la historia de un funcionario de Correos francés que se hace pasar por minusválido para lograr un gran puesto en la Costa Azul, bajo el cálido sol mediterráneo. Descubierto sus jefes, como castigo es enviado a la región de Calais, en norte del país, un sitio donde hace frío, llueve mucho y sus habitantes hablan un dialecto extraño, comen quesos apestosos, beben alcohol...
A pesar de que muchos chistes son típicamente franceses, la historia funciona y se entiende porque en el fondo es universal (es como si a un cartero extremeño lo destinaran a un pueblo del País Vasco, o si a un milanes le obligasen a trabajar en la Sicilia profunda). El guión recuerda también a la mítica serie "Doctor en Alaska" (el abrigo y el forro polar que viste, jaja...). Hay bastantes gags divertidos (como cuando el policía de tráfico le perdona las multas al saber que se dirige al Norte), algo de enredo y mucho buen rollo. Lo mejor es que la cinta se acaba cuando la gracia comienza a decaer, con la boda y tal... Para pasar un buen rato.
