La volví a ver ayer y sigue siendo estupenda. Es la historia de Muriel, una chica australiana regordeta que se evade de sus complejos físicos y de su agotadora familia escuchando bonitas canciones de ABBA. Un buen día, tras un lío con sus padres, Muriel se cambiará de nombre y se marchará a vivir a Sidney con su amiga Rhonda, lejos de su pueblo y de los cotilleos. Pero, un suceso hace que las dos amigas se distancien...
Toni Colette y Rachel Griffiths están las dos soberbias y el director PJ Hogan mantiene muy bien el equilibrio logrando un goloso cóctel entre comedia casposa y dramón sentimental. Hay momentos graciosos, pero, también otros muy dramáticos, como la dura escena en el piso de Ronda, con ella tirada en el suelo. Recomendable.
Toni Colette y Rachel Griffiths están las dos soberbias y el director PJ Hogan mantiene muy bien el equilibrio logrando un goloso cóctel entre comedia casposa y dramón sentimental. Hay momentos graciosos, pero, también otros muy dramáticos, como la dura escena en el piso de Ronda, con ella tirada en el suelo. Recomendable.
No hay comentarios:
Publicar un comentario