La volví a ver ayer y sigue siendo una joya, tan acida y graciosa como hace treinta años. Cuenta la historia de George Weber, un pianista cuarentón en plena crisis sexual y vital, que tras colarse en una boda y enamorarse de la guapa novia, decide perseguirla en su luna de miel hasta las playas de México. Allí, en la arena, bajo el sol, intentará seducir a la chica desconocida, metiendose en líos absurdos y ridículos…
La cinta tiene un reparto estupendo, salen el gran Dudley Moore, una elegante Julie Andrews, Bo Derek (que puso de moda en peinado afro con bolitas) y un joven Brian Dennehy haciendo de barman filosófico. Hay un fino humor guarrete, mucho cinismo y un sinfín de gags antológicos, como la escena del ataque de la avispa durante la boda, la visita al dentista, la caída de George por el barranco, las orgías del vecino hippie, o cuando Bo Derek explica, seriamente, la diferencia entre follar escuchando la música de Ravel, o a Prokofiev. Otra comedia del añorado Blake Edwards a recordar. Muy recomendable.
"10" (la secuencia del dentista)
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