Cuesta imaginarse un programa de música más cutre y rancio
que “Stars, izarrak kalean”. En realidad, los responsables de ETB dicen es un “talent
show”, pero la mayoría de los futuros artistas
que pasan “cantando” por el programa, serán recordados sobretodo por haber aceptado
pequeñas limosnas como gran premio de un concurso televisivo. Vale que la televisión
publica vasca no pasa por su mejor momento, vale que la crisis actual ha hecho
reducir el presupuesto del ente vasco de 140 a 100 millones de euros, pero sonsacarles la
paga a los pobres crios de Euskadi, es pasarse... El día que algún concursante suba y se atreva a cantar el tema "Txanpon baten truke", sera la risión total!!
Y es que el 75% publico que asiste a este programa callejero
son niños y niñas de los distintos pueblos vascos por donde pasa el concurso (algunos
de muy corta edad). A pesar de la ilusión de estos (y sus monedas de céntimo y
euro), la puesta en escena es pobre. Los dos presentadores tratan ganarse el
sueldo, aunque, si el merito de Maria Amolategi es haber sido
cantante de Sugan (un olvidado y muy olvidable conjunto pop vasco) la cosa ya se
hunde del todo. Si esto es cultura o si esto es entretenimiento de calidad, ETB
tiene los días contados... Cuatro canales de televisión para sumar apenas el 13% de la audiencia.
Un estafa monumental. "Hori ustelkeria, txo. Badakik, interes ekonomikoak eta interes
politikoak elkartuz gero, gureak egin dik"…. Ez dezagun
sal!!
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