La vi hace tiempo, pero me dejo muy buen sabor de boca. Es la historia de una chica sorda (Emmanuelle Devos) que trabaja en una empresa donde sus compañeros la ningunean constantemente. Un día comienza a trabajar, en la misma empresa, un joven con antecedentes criminales y demasiadas deudas por pagar. Ambos protagonistas se conocen y, tras un breve romance, el chico descubrirá la sorprendente habilidad de ella para leer los labios de la gente y espiar las conversaciones ajenas. Juntos, idearán un robo aprovechando esta circunstancia, pero la cosa se complicará...
Es un pequeño thriller francés, tan resulton como sencillo con un joven y convincente Vincente Cassel. Suspense, buenos diálogos, excelente reparto (un regordete Olivier Gourmet, capaz de hacer creíble cualquier personaje) y excelente fotografía. Una película muy cuca. Recomendable.
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