miércoles, 3 de abril de 2013

MI NOCHE CON MAUD


La volví a ver ayer y es estupenda. Es la historia de un serio ingeniero francés, aficionado a ir a misa y a leer libros de matemáticas que vive en una aburrida ciudad de provincias. Un día, un amigo de la infancia le invita a una cena donde conoce a Maud, una guapa morena, con la que se pasará toda la noche hablando de sexo y amor…

Es una de las primeras pelis que hizo Eric Rohmer y está rodada en un gris blanco y negro que va muy bien con la vida en Clermont a finales de los 60 (una época donde la gente todavía iba a misa, los hombre vestían de traje formal y en los bares se hablaba de marxismo). El guión plantea un enigma amoroso al protagonista, tendrá que elegir entre el amor de dos mujeres totalmente diferentes. Este, tras darle vueltas y vueltas, citarse varias veces con ellas y analizar todas posibilidades, tomará una decisión que creerá acertada. Pero la irónica escena del final, le mostrará que en el amor y el sexo las cosas no son siempre como uno cree... El gran Jean-Louis Trintignant, como siempre, enorme. Recomendable.

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